JALA.- Como cada año, los habitantes de Jala se aprestan para recibir a los miles de visitantes que normalmente acuden a éste pintoresco rinconcito para atestiguar la representación teatral de la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo y cuyo papel, por primera ocasión será interpretado por Joel Fernando Góngora Pérez.
“Todo mundo es bienvenido en estos festejos, siempre y cuando vengan dispuestos a vivir con auténtico fervor y recogimiento los Días Santos para que esta experiencia realmente les sirva para una transformación positiva de su vida” dijo al respecto el presidente municipal, Mario Villarreal.
Durante estos días, Jala se convertirá en una población más alegre, llena de jolgorio y de mucho colorido. Niños, jóvenes y adultos se dan cita en la plaza pública para comentar los sucesos cotidianos, mientras observan a los carruseles girar y girar. Otros sentados en los verdes prados, en las banquetas o en las bancas disfrutando de una rica bolsa de palomitas, de un sabroso jugo de caña o de los deliciosos raspados de frutas naturales.
La celebración de La Judea de Jala iniciará pasado mañana con el “Domingo de Ramos” o “La Entrada de Jesús a Jerusalén” y en la que decenas de jóvenes participan vestidos a la usanza hebrea, dándole a éste acto un colorido y una alegría únicos.
El lunes y martes los actores que le dan vida a éste festejo participarán en vistosas procesiones nocturnas con imágenes de Santa Lucía y San Antonio; y para el próximo miércoles tendrá lugar una de las tradiciones más hermosas como lo es “la bajada” del Señor de Acatique el cual es traído desde la comunidad de El Ciruelo.
Lo mejor, claro, se desarrolla durante el Jueves y Viernes Santos, con el Prendimiento de Jesús, la Ultima Cena, la Oración del Huerto, la Tentación del Diablo, el enfrentamiento de Cristo con los sumos Pontífices Caifás y Anás, para finalizar con una procesión en el que se encarcela a Jesús.
El viernes, bajo un ambiente de intensa actividad tiene lugar la persecución de niños por los Judíos simulando la persecución de Jesús por Herodes. Así mismo se escenifica el recorrido del preso cautivo por la Estación Mayor, mientras en la Basílica se realiza el Ejercicio de las Tres Caídas y la Crucifixión, culminando con la impactante entrada del Centurión que trata de salvar a Jesús, aunque lo hace tarde.
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