Acostumbro acudir con frecuencia a la Cruz Roja de Ixtlán para ver las novedades del día, pero a veces suelo conversar con mis amigos los socorristas, a quienes les reitero mi aprecio por esa gran labor humanitaria.
EL BUITRE: Si pones un buitre en un cajón que mida 2 metros X 2 metros y que esté completamente abierto por la parte superior, esta ave, a pesar de su habilidad para volar, será un prisionero absoluto. La razón es que el buitre siempre comienza un vuelo desde el suelo con una carrera de tres a cuatro metros. Sin espacio para correr, como es su hábito, ni siquiera intentará volar sino que quedará prisionero de por vida en una pequeña cárcel sin techo.
No hace mucho, después de presenciar un juego de fútbol en la unidad deportiva de Ixtlán, me encontré con mi amigo René Romero, a quien conocí allá por 1990. Él y yo coincidíamos en las ideologías políticas y siempre deduje que era un hombre inteligente; lo cual volví a ratificar esta otra vez.
Cuando éramos niños, adolecentes y aun hoy de adultos, la mayoría hicimos o practicamos algún deporte de nuestra predilección. Si tu eres de los que jugaban o juegan con los cuates de barrio, del trabajo únicamente para pasar el rato o para distraerse ¡Qué bueno!; pero déjame te hago una pregunta, ¿Acaso te gustaba perder en las contiendas? ¿Verdad que no?
Con desgano, tomé el control de mi Samsung para ver si encontraba algún programa bueno en la tele. Tenía la esperanza de que se estuviera transmitiendo un partido de fútbol. No tuve suerte.
Cierto día un mercader ambulante iba caminando hacia un pueblo. Por el camino encontró una bolsa con cuatro mil pesos. El mercader decidió buscar a la persona que había perdido el dinero para entregárselo pues pensó que el dinero pertenecía a alguien que llevaba su misma ruta.