AHUACATLÁN.
Luego de que trascendiera el desistimiento de Efrén González Celis para participar como candidato a regidor por la demarcación 4 de este municipio, los dirigentes de la alianza “Va por Nayarit” se ha enfrentado al problema de encontrar el perfil indicado para postular a “su gallo”, uno que pudiera contrarrestar las simpatías que han despertado las aspiraciones de Felipe Benítez de Movimiento Nayarita y Alex Solís de la coalición “Juntos Haremos Historia”.
Y todo parece indicar que al fin lo encontró en la persona de Juan Luís Aguayo López. Un comerciante dedicado exclusivamente a su trabajo y quien entre otros andares, es reconocido por jugar con talento el voleibol y preparar danzas autóctonas para el barrio de El Chiquilichi, dónde ha vivido toda su vida muy cerca de Dirección de Seguridad Pública Municipal, dónde por cierto, regentea un puesto de jugos y dulces.
Anteriormente a este trabajo, fue por muchos años el agente de ventas de la Terminal de Autobuses Pacífico, además de atender la Papelería Fausto en el centro de Ahuacatlán. Como se aprecia de esto, no es Juan una persona ligada al servicio público o a la política. Pero tampoco se percibe que sea ingenuo. Pues ya da atisbos de sagacidad política al ocultar su posible candidatura cuando a pregunta expresa se le cuestiona, respondiendo que no es momento de hablar de ese tema.
Sin embargo, muchos lo han visto ya en diferentes actos en coordinación con Chuyín Bernal y el resto del equipo que conforma esta alianza. De extracción humilde, hijo del bien recordado Claudio Aguayo y Catalina López, hermano del famoso Malín; Juan tiene una oportunidad para demostrar que no es la posición social o los grados académicos lo que hacen a un buen servidor público.
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