Al paso del tiempo, la escuela cambia de nombre y se convierte oficialmente como escuela secundaria federal para trabajadores “Ramón Corona” en recuerdo y homenaje al General que derrotó a uno de los azotes de Nayarit y particularmente de Ixtlán, a Manuel Lozada “el Tigre de Álica”.
Se cuenta que éste General por su valentía y capacidades le estaba haciendo sombra al mismísimo presidente Porfirio Díaz que lo mandó a un destierro suave al nombrarlo Embajador a un país de Europa.
Fue gobernador de Jalisco y fue asesinado por un hombre mandado por el dictador expresamente para ello con tres puñaladas en el corazón. Ese hombre se llamó primitivo Ron, originario de Amatlán de Cañas. La prensa que protegía al porfirismo publicaba que fue suicidio.
Algunos directores de esos años fueron Maura Mendoza, Domingo Becerra Rubio, Liberato Montenegro Villa, Manuel Pérez Solís, Marco tulio Delgado Becerra y le toca a Luis Ignacio Villanueva Ponce en 1985 realizar el trámite para que le otorgue recursos federales y su clave 18DSN00055. Otros hombres y mujeres relevantes que escribieron en el libro de la historia con su labor cotidiana fueron Valdemar Montañez, Concepción Sánchez de León, Teresa Flores Palomera y Ramón Martínez.
Me llegan los recuerdos en esta oficina austera con el retrato enorme del General Lázaro Cárdenas cuando en las afueras de este edificio estaba los zánganos en busca de las abejas reinas que no se concentraban porque les llegaba la pasión y los nervios de imaginar la hora de la salida cuando el reloj marcaba las ocho y caía la noche y en el poste recargado, en la banqueta de enfrente; allá en la Quinta Ruíz, en cada espacio estaba por darse el encuentro de los enamorados. Varias veces intenté al asomarme por las ranuras de las ventanas de madera y me tropezaba con sus ojos, pero huía como un colibrí.
De agosto del 2013 a enero del 2014 se llamó escuela de nueva creación porque se realizaba la transición y el 13 de enero a julio de 2015 obtiene el nombre escuela secundaria general “Lázaro Cárdenas” clave 18DES0065Z. Cambia en agosto a turno matutino, las edades ya son menores y observo que están como aquellos alumnos míos.
Siguiendo con las fechas, el 16 de octubre de año 2014 se nombra a Pedro Roberto Velazco como director con clave y se abre un capítulo de este lugar de Zaragoza 97. Aquí escribiendo con prisa me imagino la historia narrada por este amante de la historia como si fuera una película. Camino por sus pasillos, me detengo en el patio y leo “Aquí se entra para estudiar y aprender y se sale para ser útil a la sociedad”.
Paso por los grupos y en esta pared está clavada una enorme lona de las visiones y misiones de toda la familia que intervienen en la educación, que se torna difícil por los distractores y la complejidad de la sociedad. En el grupo de primero están 35 alumnos y lleva el aula el nombre de la maestra Pastora Mota Rosas, amiga y compañera de labores de mi madre dolores Arce Ávila; en segundo son 26 y lleva María Concepción Angélica Sánchez de León, mi maestra de español en la secundaria Amado Nervo en 1972; en tercero 26 y el nombre de Juan Manuel Romero Mora conocido como “La Chiri”.
Observo que hay un extinguidor y un buzón para sugerencias y quejas y el piso es de los mosaicos González de aquel taller que estaba a un lado de nuestra casa de la Jiménez hace 45 años. Hace algunas semanas Pedro Roberto me invitó a conocer el laboratorio de química rehabilitado y con la introducción del agua; el pago para los ensayos de la banda de guerra; el pintado de la escuela; reparación de la fachada y banquetas con sus palmetas.
Le pregunto por los retos y me señala que el local no cubre con las necesidades y requisitos de la escuela para que funcione a cabalidad. Se necesitan espacios deportivos y talleres. Ha solicitado el local donde ocupó la escuela de educación especial, psicopedagógico. El lugar de la URSE. El reto educativo es ofrecer una educación de calidad, excelente en el servicio con buen trato y calidez.
Los problemas es que los jóvenes vienen de familias desintegradas de colonias marginadas y no se ha logrado el apoyo total de los padres de familia. Pregunto por las reglas de convivencia y confiesa que todavía hay acoso escolar el llamado “bullying”. Las secretarias me enseñan el reglamento y socializo con ellas.
Le pregunto a Rosa Elena Serrano Rivera que tiene laborando desde hace 24 años sobre el papel del director y contesta que “es un maestro considerado, humano, porque todos nos necesitamos”. Los sucesores de aquellos místicos docentes, Jovita Aguiar, Nayeli Cárdenas, Oscar Villanueva, Julieta Zepeda Soto, Néstor Arroyo Ávalos, Irma Preciado Jaime y los auxiliares indispensables: Mario Corona, Ma. Rebeca Rosales, Ana Montañez Villanueva, Rosa Elena Serrano, Héctor Álvarez, Ramón Canales y José Torres. Los que cubren a Consuelo García y Katery Ramos desde enero Ricardo López y Yolanda Valdez.
Última mirada y las macetas pintadas de blanco, los arcos, los pilares, sus ventanas de antaño, la efigie de Lázaro y la música ambiental que tranquiliza el sistema nervioso central y reposa el alma.
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